¿Quedamos a tomar café?

Yo me dispongo a tomarme algún que otro cafetito mientras tecleo, intentando pensar con cada sorbo y escribir entre uno y otro disfrutando de un momento especial en el que pueda volcar ideas, opiniones, sobre libros, música, imágenes, dar rienda suelta a algún que otro desvarío, desahogar algún grito, espero que también algo de humor, a través de esta gran ventana virtual.

Abierta queda. Si alguien quiere tomarse un café conmigo bienvenido sea.

miércoles, 23 de enero de 2013

Nostalgia lectora

Buscando información sobre un libro que leí de niña me encontré en el todopoderoso Google justo con un ejemplar idéntico al mío. Se trata de una edición del año 1973 y está a la venta en una página para coleccionistas. Con curiosidad he empezado a teclear títulos de aquel tiempo y para mi sorpresa he dado con un buen número, y no me refiero a ediciones posteriores sino a las mismas que permanecían adormecidas en mi recuerdo.

La nostalgia estaba servida.

No conservo ningún libro de los que leí entre los… 8 años más o menos y los 14. La gran mayoría porque eran de mi hermana mayor que tuvo la ocurrencia de casarse y marcharse a otra ciudad llevándose sus libros, y los que eran de mi propiedad acabaron en la misma ciudad y en la misma casa porque se los llevé yo misma, años más tarde a mi sobrina, para incentivar en ella la lectura.

Mis posibilidades de comprar libros eran limitadas y la de recibirlos como regalo aún más. Al contrario que ahora que tengo los libros haciendo cola a la espera de ser leídos, por entonces releía mucho y llegó el momento en que cuando llegaba el pedido que mi hermana había hecho a Círculo de Lectores no podía soportar la impaciencia y saltándome las normas los leía antes que ella. Al principio los cogía a escondidas para evitar la bronca, pero acababa pillándome. Al cabo de un tiempo se rindió y la condición era que tenía que dejárselos en cuanto ella me los reclamara.

A partir de los 14 y con los libros de mi hermana fuera de mi alcance no tuve más remedio que buscarme la vida y con el compromiso de que yo me los pagaría ahorrando de mi paga semanal, tomé el relevo y me suscribí al Círculo de Lectores. Desde entonces los conservo todos pero de los anteriores sólo me queda el recuerdo.

No he podido resistirlo y rescatándolos del olvido he seleccionado unas cuantos que señalan de una forma mas o menos aproximada el camino que de libro en libro fui trazando durante esos años. Las huellas que me dejaron algunos de esos libros no las ha borrado el largo tiempo transcurrido y permanecen frescas y vivas en mi memoria por encima de muchas otras lecturas posteriores.

Si os apetece acompañarme en este paseo a través del tiempo a lo mejor os encontráis con alguno de esos título que acumulan algo de polvo en el fondo de vuestra estantería.

¿Os acordáis de las aventuras de Los Cinco? Seguro que aquí coincidimos más de uno.

Después de los cuentos, el primer libro que leí fue Los cinco en peligro. ¿No os preguntabais a qué sabría la cerveza de jengible?


Y este el primero que yo compré. Mi afán era completar la colección pero no lo conseguí.

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Para contrarrestar el espíritu aventurero podía echar mano de esta colección de la editorial Bruguera que intercalaba algunas páginas con ilustraciones. Eran más "propios" de niñas pero yo disfrutaba más los anteriores. 



Descubrí a Julio Verne con otro de esta misma colección.








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No sé en que momento pasé de las aventuras de Los Cinco y de las historias de princesas a José Luis Martín Vigil. Un sexo llamado débil me llevó hasta Bilbao para mostrarme la diferencia que mediaba entre vivir en Neguri o en la margen izquierda de la ría, en Baracaldo y a sus protagonistas, Coro, Paula y Baby las recuerdo casi como a viejas amigas del colegio.


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No todo eran lecturas heredadas de mi hermana, también mi hermano, un año mayor que yo, aportó su granito de arena cubriendo los huecos que inevitablemente quedaban entre libro y libro con las novelitas de Marcial Lafuente Estefanía y la coleccion Azañas Bélicas. Teniendo tres o cuatro no te faltaba lectura, una vez acabadas iba a cambiarlas por otras.

Yo prefería las de la Segunda Guerra Mundial a las del oeste. Con ellas conocí al Zorro del Desierto y me metí en las selvas de las islas del Pacífico.




Los tebeos también llegaban a casa de mano de mi hermano. Mis preferidos siempre fueron Mortadelo y Filemón y un número dedicado a los monstruos de toda la vida: Frankenstein, Drácula, etc. el  primero que me hizo reír a carcajadas.













Probablemente después de unos y otros se pasó, mi hermano, a los misterios de Agatha Chistie y yo detrás.

No recuerdo sin embargo ningún título concreto, quizá porque se me confunden con las películas basadas en ellos que he visto posteriormente. Los que pasaron por mis manos pertenecían a esta colección y me gustaban más los protagonizados por Miss Marple que los de Hércules Poirot.











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De las tres novelas siguientes probablemente las dos primeras las comprara mi hermana después de ver la película en el cine. Yo leí primero los libros. En el caso de Pelham, uno, dos, tres, mi hermana debió ver la versión de 1974 y yo he visto la de 2009. De La aventura del Poseidón también hay dos versiones cinematográficas. A mí me gusta la de 1972, que evidentemente vi mucho después en la televisión. 



Y la crudeza de las historias reales la descubrí con estos dos títulos.

El Diario de Ana Frank me impresionó particularmente. La primera historia que me hizo llorar.





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Un verano, puedo calcular que rondando los trece años, intenté leer El exorcista, pero tras un par de noches  en las que las pesadillas no me dejaron dormir, tuve que rendirme. Creo que es el principal culpable de que no soporte el género de terror.



Al otro lado y como contrapunto, el primero que me hizo reír con ganas.








Estos estuvieron muy de moda durante un tiempo. Historias sobre adolescentes con problemas: reformatorios, drogas, cáncer... 
Estos eran míos, pero les tengo perdida la pista.
El que sí era de mi hermana y uno de los primeros de Círculo de Lectores que entraron en casa es Nacida Inocente que creo que fue el que inició "la moda".

De esta última etapa unos han tirado de otros y he rescatado estos cuatro como muestra. María de Jorge Isaac también fue de los primeros de Círculo y recuerdo que me costó acabarlo. Un saco de cánicas otro contacto con el holocausto. Siete años de cárcel me impresionó bastante y Mi amor ciego, no es lo que parece. 



Dejo para el final dos que tuve que leer a escondidas no por impaciente sino porque mi hermana consideraba que eran un poco subidos de tono para mi edad. A mí no me causaron ningún trauma. 

De Orgullosa Raquel no recuerdo mucho, excepto que no era para tanto misterio. 

Belle de Jour me cautivó.




Termino con una novela que he releído varias veces porque en este caso, aunque mi hermana se llevara el primero que leí (la imagen corresponde a ese primero que he encontrado en mi buceo nostálgico) yo compré posteriormente una edición de bolsillo para mí. 
Tiene este libro un puesto de honor en mi memoria, porque me metí tan de lleno en la historia que cuando llegué al final, prácticamente no podía leer las últimas páginas porque lloraba ¡a moco tendido! 
Además del contexto histórico  y social en el que se desarrolla que me resultaron interesantísimos, la relación entre Kira, Leo y Andrei es una de las más bellas historias que me he encontrado nunca. Si la hubiera leído con veinte o con diez años más quizá no me hubiera conmocionado tanto, pero era una jovencita de trece años con la sensibilidad a flor de piel.


¿Habéis leído Los que vivimos de Ayn Rand

¿Cuál es el libro que más os marcó a vosotros en aquellos años? Me encantaría que me contarais algo de vuestra experiencia juvenil.


No están todos pero si son una muestra representativa de mis lecturas infantiles y juveniles  y tienen la particularidad de que no conservo ninguno de ellos.
Las imágenes han salido todas de internet y se corresponden con las ediciones que leí en su momento. 



32 comentarios:

  1. Mi nostalgía lectora se centró en Romanies, uno de los primeros libros que recuerdo y me empeñé en comparlo para mi hija, cuando tenga la edad adecuada. Me costó sudores.

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    1. No conocía este título, gracias por compartirlo.
      Es natural que si hemos disfrutado una lectura intentemos que nuestros hijos también la vivan. Yo también le he hecho en más de una ocasión.


      Besos

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  2. Me has llevado a unos años en los que muchos de esos libros me acompañaron en horas y horas de lecturas y diversión.
    Verne, Salgari, Agatha...que buenos recuerdos. Pero siempre recordaré con especial cariño Dos años de vacaciones de Julio Verne.
    Un abrazo

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    1. Como yo iba heredando las lecturas de mi hermana leí menos de Verne y no he llegado a leer a Salgari, al que conozco por las adaptaciones para la TV o el cine.
      Gracias por compartir ese título especial que todos guardamos en un sitio preferente. Verne siempre garantizaba buenos ratos.

      Besos.

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  3. Grandes Recuerdos de Lecturas y de diversión.
    Los 5 me acuerdo que me encantaban leerlos.
    Muy buena Entrada.
    Un abrazo.

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    1. Me parece que Los Cinco nos han acompañado a casi todos y nos han hecho pasar grandes tardes.

      Besos

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  4. De todas las que has mencionado, ya no por la calidad sino por los buenos ratos en mi época adolescente: Marcial Lafuente Estefanía. Leí la tira de esas pequeñas novelitas del far West (el bueno, solía ser el Ranger, siempre medía 6 pies y al final hacía morder el polvo a los cuatreros y ventajistas, jajajaja). Y mira, ahí me aficioné a la música Country.

    Un beso

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    1. ¡Tienes razón! Siempre medían 6 pies y eran los más rápidos desenfundando el colt. Eran unos tipos muy duros por fuera pero tiernos por dentro, jajajaja. No sé bien por qué yo asocio estas lecturas con Elvis Presley (a mi hermano le dio fuerte con él durante una época)

      Besos

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  5. qué recuerdos! yo lei un montón de los cinco y también esa misma edición de los de Agatha Christie. Años más tarde Viven y El diario de Anna Frank y los de Super humor ocupan una estantería entera en casa, aún los sigue comprando mi novio. Yo un libro que siempre recuerdo lo mucho que me gustó de niña es Las minas del rey Salomón pero luego tuve la tentación de leerlo hace unos años y claro, la sensación no fue la misma
    besos

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    1. Tenemos unas cuantas lecturas juveniles comunes.
      En mi casa también hay una estantería llena de Super Humor (hay aficiones que se transmiten con facilidad) pero son un poco más modernos que los míos. Son un clásico apto para todos los públicos.
      Sin embargo no es fácil revivir las sensaciones de esos primeros descubrimientos.
      Me ha encantado compartir contigo ese recuerdo especial.

      Besos

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  6. Qué magnifico recorrido a esas lecturas más juveniles. Son muchos los libros que me acompañaron y me apasionaron como loca, haciendo memoria te diré que Enid Blyton me encantaba sobre todo en su serie de Las torres de Malory, Santa Clara y La traviesa Elizabeth (también leí Puck pero no fue igual de flechazo), otro libro que me marcó fue Edad prohibida, Nada de Carmen Laforet, Jane Eyre, V.C. Andrews, Agatha Christie, Martes con mi viejo profesor, Manolito Gafotas, Zipi y Zape... ¿sigo? por decir algunos, la verdad es que la nostalgia de estos libros es preciosa. Besos y gracias por este café.

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    1. No llegué a leer ninguno de Las torres de Malory, los conozco porque también fueron los favoritos de mi pareja.
      Por cierto, tengo ahora mismo a mi lado Edad Prohibida pendiente de devolverlo a su estante. Lo rescatamos hace unas semanas porque se lo tuvo que leer mi hijo en el instituto. Me gustó mucho pero no lo he incluido porque es un poquitín posterior, lo compré por recomendación de un primo y continúa a mi lado.
      Ha sido un placer compartir recuerdos y café.

      Besos

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  7. Por tu referencia sobre Los cinco se nota que eres muy joven, todos esos libros que comentas llegaron a mi casa en esa época pero fue por mis hijos que según fueron creciendo me llenaban todos los huecos que podían. Aun hoy, teniendo los tres sus casas, los libros me los dejaron a mi.¿ No se hasta cuando? En mi casa también fuimos del Circulo de Lectores.
    Después de los tebeos de Princesas, Roberto alcazar y Pedrin, El Guerrero de Antifaz, el primer libro que leí, fue Mujercitas, luego, El diario de Ana Frank, me los dejaba una tía mía que es un poco mayor que yo.
    Besos joven.

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    1. Bueno Rafaela, seguramente sea más joven que tu, en lo que ya no puedo estar tan de acuerdo es en que sea "muy joven". Libros de Los Cinco también los tiene mi hijo en su estantería. Afortunadamente han seguido reeditándose y varias generaciones hemos disfrutado con ellos.
      Ahora que lo mencionas yo también leí Mujercitas, pero en este intento de rescatar viejas lecturas se me había pasado. Gracias por recordármelo y compartir las tuyas.

      Besos.

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  8. Hoy te has ganado mi corazón lector. Con los cinco... los Superhumor y con Marcial Lafuente Estefanía y sus rubios con barba de tres días que miden 7 pies. Suma un verne y a Miss Marple.. y esos fueron mis comienzos
    Besos

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    1. Es que esas primeras lecturas se recuerdan con un sabor especial ¿verdad?
      Por lo que veo compartimos unas cuantas. Aventuras, humor, acción y misterio. Un fórmula infalible para engancharnos a este "vicio"

      Besos

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  9. De todos los recuerdos que nos traes, te puedo decir que a mí me gustaban más las películas de Sissi que los libros. Luego, me quedo con las novelas de M.L.Estefanía, Ágatha Christie, los tebeos, y dos grandes éxitos como fueron VIVEN y El diario de Ana Frank (qué lloreras, madre mía). Los Cinco me pillaron ya un pelín crecidita. Un beso.

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    1. También compartimos unas cuantas lecturas.
      Me ha sorprendido un poquito ver que somos muchos los que nos entretuvimos con M.L.Estefanía.
      Supongo que llorar con Ana Frank es casi, casi inevitable, sobre todo cuando piensas que no es ficción, sino que ocurrió de verdad.
      Me ha encantado conocer tu experiencia, Koncha.

      Besos

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  10. ¡Hola, jovenzuela! Je, je. "Las memorias literarias de Jara" ¿Te gusta el título? Me has dejado impresionado, sí.
    Yo ya he dicho por ahí que mi flaca memoria me habla de Mortadelo y Filemón, en la época de TBOs, y de Drácula, ya con un libro en la mano sin dibujitos.
    ¡Maestra! Me despido hasta otro día.
    ¡Besazos!

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    1. Jovenzuela y memorias en la misma línea... no sé bien como tomármelo.
      A Drácula le quiero echar yo el diente un día o un mes de éstos, a ver si venzo mi fobia hacia el género.

      Besos

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  11. ¿Te puedes creer que no he leído ninguno de Los cinco? Algún día, aunque ya sea mayor, me voy a quitar esa espinita, que todo el mundo me habla de estos libros. Yo iba también a remolque de mi hermano, así que lo que él leía yo lo leía después. Recuerdo un libro adaptado que me encantaba, De grumete a almirante. Era una versión adaptada del libro, pero también tenía sus viñetas como si fuera un cómic. No sé cuántas veces habré leído este libro. Y luego el Jabato, el Capitán Trueno, el Guerrero del Antifaz, que tenía una colección bien completita... Y Mortadelo y Filemón! La de horas que he pasado con estos tebeos!
    Besotes!!!

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    1. No eres la única que no ha leído ninguno de Los cinco, pero como dices nunca es tarde y con niños cerca la oportunidad está servida.
      Los comics no nos han faltado a ninguno, es una apuesta segura ya sea por el camino del humor o de la aventura.
      Está siendo un placer compartir estas primeras experiencias lectoras con vosotros.

      Besos

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  12. Por razones obvias (la edad, el idioma) hoy "nuestra línea" no lo es tanto en la primera juventud salvo en Los Cinco (¿cómo no?) luego se recupera con Jules Verne (¡cómo no! otra vez), Ana Frank y mis lágrimas también, Viven, Miss Marple, Pregúntale a Alicia...
    Nada de Mortadelo y Filemón que descubrí al llegar aquí pero todos los de Tintín y Asterix.
    Los títulos de mi descubrimiento de la lectura son muchos... y también ...¡tengo entrada sobre ellos! ¡¡¡te aseguro que no es broma!!! :D :D :D
    Besote de carcajada.
    Ps. ¿Y Las hermanas March? (Jovencitas, aquí) ¿y Colmillo blanco?... ¿no? ;)

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    1. ¿Y dices que "nuestra línea" no lo es tanto? en la primera juventud y en la segunda y ya veremos en la tercera. ¡¡Me dejas completamente sorprendida!!
      Además a pesar de toda la diferencia de idioma o de edad que pueda haber creo que tenemos muchas lecturas en común.
      En los cómics es normal no coincidir. De Tintín no he leído nada pero de Asterix si leí alguno.
      Y Mujercitas también, jajaja. Rafaela me las ha recordado con su comentario. Colmillo blanco lo recuerdo en el cine pero no he leído el libro.
      ¡¡Esperaré tu entrada gemela!! :))

      Besos

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    2. :D No tienes por que esperar ;) fue de mis primeras entradas :D
      Ya veremos lo que nos depara el próximo cruce de línea.
      Nos lo tendrán que mirar ;)

      Besos

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  13. Jovencitas no!!!! :D "Mujercitas" :)

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  14. ¡¡Hola!!
    Tú también me has traído nostalgia con esta entrada, sniff sniff. Sobre todo me identifico con los libros de Enid Blyton, si bien a mí los que me marcaron fueron Torres de Malory y Las mellizas O'Sullivan.
    Besos.

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    1. Creo que Enyd Bryton de una forma u otra nos ha dado gratas horas de lecturas a todos los jóvenes durante varias generaciones.
      Gracias por pasar y compartir esas primeras lecturas que te marcaron.

      Besos

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  15. Leí El Padrino siendo muy crío todavía y joder si me marcó....

    Me ha gustado mucho este post.
    Me ha llevado a otros tiempos.

    Besos.

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    1. No me extraña que te impresionara El Padrino. Conociendo la versión cinematográfica puedo imaginar que el libro debía ser bastante crudo.
      Esos otros tiempos casi siempre nos parecen mejores. Yo disfruté mucho conforme encontraba portadas y recordaba títulos.
      Gracias por venir a contarnos tu experiencia.

      Besos

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  16. Uff...... cuantos recuerdos agradables viene a mi mente.... "Los cinco" , Julio Verne, "Super Humor", "Viven", "El diario de Ana Frank".... creo que prácticamente todos han pasado por mis manos en algún momento de mi infancia.
    Gracias por la recopilación.
    Besos.

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    1. Hola Susana, me alegra haberte traído buenos recuerdos. Veo que compartimos unas cuantas lecturas. Gracias por pasar a compartirlas.

      Besos

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