No hay ni una nube en el cielo y el sol impone su fuerza y su brillo, pero Raquel no tiene ganas de jugar. Se sienta en la hierba y aspira su olor, se deja caer hacia atrás, mira ese cielo sin límites y se siente perdida. Se hace pequeña y no encuentra donde agarrase. ¿Dónde están las nubes para hacerse una cuna y que el sueño la acoja en sus brazos de olvido?
La tarde no avanza, los pájaros vuelan felices y veloces en ese cielo sin barreras, pero Raquel no quiere jugar.
Rueda por el suelo hasta quedar de espaldas al inmenso azul que la rodea.
Grita: ¡Viento, trae a las nubes!
Después más bajito: quiero verlas bailar con sus vestidos de gasa, quiero que formen un corro y en medio de ellas hacerme un ovillo... cerrar los ojos y que el viento jugando entre ellas, me silve al oído canciones de cuna.
Los niños se marchan, los ruidos se aquietan, porque el sol aburrido de un cielo sin gracia les vuelve la espalda. Las sombras se alargan y allí, a su vera, Raquel se ha dormido.
Ya no hay sol, el azul se ha perdido y al conjuro del sueño, las nubes, ¡al fin!, han venido.
Qué bonito Jara, las nubes y el texto. En el conjuro del sueño me instalo ya y te dejo un beso de buenas noches.
ResponderEliminarQue maravilla de texto y de fotos!!!
ResponderEliminarDan ganas de volverse a acurrucar.
Besindios.
Muy bonito tanto texto como imagenes.
ResponderEliminarSon bonitas las nubes verdad?
ResponderEliminarA mí me gustan hasta las de tormenta.
Besos.
A mi me encanta un cielo con nubes. Bueno, en realidad que se alterne la cosa. Cuando después de una tormenta el sol se cuela entre los jirones de nubes, se crean esos contrastes que hacen del cielo un lienzo tridimensional bellísimo. Y de nuevo la estética de tu entrada es muy buena, fotos + texto intercalado = gozada.
ResponderEliminarUn besazo
Una maravilla de Textos y de Fotos , casi se pueden tocar las nubes con las puntas de los dedos .Me encanta contemplar las nubes y ver la enorme cantidad de formas , tamaños y colores que son capaces de regalarnos . Sería precioso poder tocar una , sumergirse en ella y volar con ellas . Es como un maravilloso baile colgado del cielo y están ahí para que las contemplemos y las apreciemos .
ResponderEliminarGracias por tan hermosas palabras y Fotos.
Un abrazo
Preciosas fotos, precioso texto...
ResponderEliminarYo, a menudo vivo en las nubes bonitas... pero si son demasiadas y negras... pues estiro el cuello por encima de ellas y sigo mirando el sol a los ojos.
Ahora mismito, preciosas y primaverales nubes encima de la sierra ;)
Besote
Precioso Relato protagonizado por esas Nubes que se pasean y se van agolpando.
ResponderEliminarAbrazos y besos.
Como entiendo a Raquel... No hay cielo más aburrido que aquel que está sin una nube. ;)
ResponderEliminarSaludos.
Siempre he tenido muy buena relación con las nubes. Yo también las traduzco a mi manera. Las miro, las hablo, las doblo, las plancho... Me ha encantado tu relato, precioso. Y tus nubes, ¿o las de Raquel? Un besito.
ResponderEliminarHas pintado unas preciosas nubes con tus palabras y se han sentido muy queridas. Preciosas fotos.
ResponderEliminarBesos.
Hola Jara, siempre me han gustado las nubes y ver esas formas tan mágicas que suelen tener, me gustan las blancas y esas grisáceas me encantan:), has escrito un relato precioso y me ha gustado muchismo, así como estas bellas imágenes de las nubes que son magnificas:)
ResponderEliminarBesos.
Precioso Jara! Me ha parecido volver a mis años de niñez y como Raquel querer envolverme con las nubes.
ResponderEliminarLa primera foto parece que la hiciste desde un avión.
Besos.
Que bonito relato, nada hay tan cambiante y a la vez tan seguro como las nubes. Besicos.
ResponderEliminar¡Qué bonita entrada! Tierna y relajante. Dan ganas de acurrucarse, de dejarse llevar por esas nubes con tus palabras...
ResponderEliminarBesotes!!!
Hermosas imágenes, precioso relato.Me gustan las nubes me transmiten sosiego. Besos
ResponderEliminarUn relato precioso. Me has recordado a mi infancia, cuando me tumbaba sobre el césped jugando a adivinar qué dibujaban las nubes en el cielo
ResponderEliminarBesos
Dile a Raquel quue no llame a las nubes: ya nos sobra el agua...
ResponderEliminarMuy bonito, Jara. Por aquí por cierto las nubes se nos están yendo y podemos ver el cielo azul al fin!!
ResponderEliminarBesos,
Veo que el que más y el que menos mantiene una relación bastante cordial con las nubes, que no necesariamente tienen que traer lluvia, aunque las nubes de tormenta son todo un espectáculo. Esta primavera se ha hecho de rogar un poquito y había ganas de cielos azules, pero salpicado de nubecillas blancas y juguetonas, mejor. A mi me sigue encantando tumbarme en el suelo a imaginar formas y ver como se van transformando.
ResponderEliminarMuchas gracias a todos por vuestra visita y vuestros comentarios.
Besos
Besos
Poética entrada , enhorabuena, Abrazo.
ResponderEliminarqué bonito! tanto el texto como las imágenes, preciosas
ResponderEliminarbesos
LAS NUBES A VECES TIENEN FORMAS INQUIETANTES, FIGURAS ALADAS.
ResponderEliminarPRECIOSO TEXTO.
BESOS QUERIDA AMIGA.
CARIÑOS
Me recuerda a una canciòn de cuna. Enhorabuena
ResponderEliminarun abrazo
fus