¿Es un tsunami, un agujero negro, un hechizo? ¿Un ERE buscando cobijo? ¿Pasmo incapacitante? ¿Parálisis neuronal? ¿Neurastenia? ¿Astenia primaveral en grado
superlativo? ¿Despido fulminante por absentismo laboral? ¿Abulia, ansiedad, pereza, estrés, hastío? ¿Miedo escénico, encefalograma plano? ¿Es un k.o.
definitivo, un stand by provisional, una suspensión criogénica? ¿No eres tu, soy
yo? ¿Soy yo y mis circunstancias? ¿Tu y tu voracidad que todo lo arrasa?
¿Qué el pasa al blog?
No sabría decirlo. No tengo certezas. Ni
diagnóstico. Ni análisis válido. No sé si declarar el siniestro total y desconectar
el respirador artificial o si dejarlo macerando en una solución isotónica. En
un sin vivir andamos. Incapaz de tomar la decisión de declarar el fin de sus
días e incapaz igualmente de insuflarle vida. Y en este limbo indefinido van
pasando los días. No me gusta. No me gusta irme así. Intenté un parte de incidencias y... ¿problemas? ¡problemas tenemos todos! Intenté preparar su discurso de despedida pero tampoco fui capaz. Me resulta doloroso echar la llave.
Declaro pues el estado achacoso de este espacio, por múltiples anomalías concretas y abstractas, sin que se haya podido establecer cual fue la primera, ni la más grave, y por tiempo indefinido, sin
renunciar a la esperanza de que pueda sacarle de él en un tiempo prudencial con
una solvencia mínima. Siento que este estado de postración afecte también a mi
relación con los blog amigos y espero encontrar el remedio para no perder el
contacto.
A la espera de tiempos más venturosos para ambos os dejo una imagen que quizá acierte con el diagnostico mejor que las palabras.
![]() |
Estatua del Angel Caído. Parque de El Retiro (Madrid) |